por Bryan García
Este movimiento de la ACC podría ser tan solo la punta del iceberg en cuanto a movimiento de universidades a otras conferencias, propiciando la creación de superconferencias y la caída de alguna de las majors actuales, como ya comentamos hace algunos días mediante un artículo.
Syracuse y Pittsburgh podrían no ser los únicos equipos de la Big East en hacer la maleta hacia la ACC, ya que se ha rumoreado fuertemente la posible inclusión también de los Scarlet Knights de Rutgers y de los Huskies de UConn, vigentes campeones de baloncesto. De la misma forma, universidades como Texas o Texas Tech han sonado también como posibles integrantes de la Big East para sustituir a Panthers y Orange.
Sin embargo, la presidenta de la universidad de UConn, Susan Herbst, ha negado en la tarde de ayer la posible inclusión de los suyos en la ACC alegando que los Huskies son “un orgulloso miembro de la Big East que ha tomado un papel esencial en el éxito de la conferencia en estos últimos años“.
No es el único cambio que está pendiente de aprobación en la liga, ya que los Aggies de Texas A&M han solicitado también hace algo más de dos semanas su incursión en la Southeastern Conference (SEC).


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