El pivote de Oklahoma City Thunder protagonizó una
pelea en un club nocturno mientras intentaba golpear al dueño del lugar.
Fue arrestado y liberado tras pagar 150 dólares de fianza.
El pivote de los Oklahoma City Thunder, Kendrick Perkins, ha sido detenido por conducta desordenada e intoxicación pública, después de haber protagonizado un altercado el sábado por la mañana en el sur del estado de Texas.
Según la policía de Beaumont (Texas), se percataron de la asistencia de una gran cantidad de personas a las afueras de un club nocturno después de las 2 de la madrugada (hora local), y recibieron informes de que había una trifulca dentro del local.
Un policía dijo en su atestado que vio a Perkins rodeado de unas 50 personas mientras el jugador trataba de golpear al gerente del lugar.
De acuerdo con el oficial, la multitud trataba de sacar a Perkins por la puerta trasera del club, mientras el jugador gritaba obscenidades y continuaba peleando.
Perkins fue puesto bajo arresto y llevado a la cárcel del condado Jefferson.
Según la televisión local, Perkins quedó en libertad después de pagar 150 dólares de fianza.
Perkins se encontraba en esa ciudad, a unos 90 minutos de Houston (Texas), como anfitrión de una serie de actividades para conseguir fondos para su fundación, dirigida a ayudar a los niños y concienciarles contra las drogas.
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