Hedo Turkoglu también se marchó, dejando a los Toronto Raptors sin nadie que haya sido el foco ofensivo de algún otro equipo en la NBA.
La nómina para la temporada 2010-11 le brindará un verdadero reto al entrenador de los Raptors, Jay Triano. Pero este último también ve como una oportunidad la falta de una estrella en el equipo.
"No tenemos a nadie que se deba encargar de nuestra ofensiva", afirmó Triano. "Vamos a ser un conjunto muy balanceado y tendremos distintos jugadores que deben mejorar en este aspecto. Y, debido a esto, hay muchas cosas más que podemos hacer en el ataque".
El libro de jugadas se está volviendo a escribir en Toronto y Triano está tomado prestada una o dos páginas de algunos equipos nacionales que vimos el mes pasado en el Campeonato Mundial de la FIBA. Como asistente técnico del equipo de Estados Unidos, Triano vio videos y preparó reportes de los rivales de los estadounidenses. Y muchas veces pudo observar cosas que le gustaron.
“Me gustan como mueven el balón los equipos internacionales", dijo Triano. "Creo que la forma en la ellos mueven la pelota y la manera como hacen cortes les ayuda a superar el estado físico y atlético que tienen otros conjuntos. Eran muy precisos en la forma como desarrollaban su ofensiva".
Sí, los Raptors están llevando el estilo europeo un paso más allá de lo que hemos visto. Triano tendrá al menos cuatro jugadores internacionales en su rotación esta campaña, siendo sus dos mejores anotadores, Andrea Bargnani y Linas Kleiza, provenientes de Europa. Pero el cambio de juego a un estilo ofensivo europeo se debe más a las habilidades de sus jugadores, que a las nacionalidades de estos.
Toronto tuvo la sexta mejor ofensiva la temporada anterior, marcando 108,6 puntos por cada 100 posesiones. Pero aunque su equipo tiene problemas mucho más grandes en la defensiva, Triano casi nunca estuvo conforme por la forma en la que su club movió la pelota.
"Ofensivamente, creo que nos atascamos mucho cuando teníamos el control del balón la temporada pasada", dijo el entrenador. "Distintos jugadores necesitaban tener la pelota en sus manos. Por eso es que me gustaron muchas de la cosas que hicieron los conjuntos europeos en cuanto a mover el balón".
Claro, si Triano desea que su equipo sea de alguna forma competitivo esta temporada, mejorar su defensiva debe ser su principal prioridad. La defensa de los Raptors fue simplemente atroz la campaña anterior y finalizó de última al permitir 110,2 puntos por cada 100 posesiones de balón. Permitieron 108 puntos o más en 35 ocasiones y ganaron sólo cuatro de esos encuentros.
Los problemas defensivos de los Raptors se presentaron por razones más allá de su nómina.
"Defensivamente, el año pasado, tuvimos momentos muy difíciles", admitió Triano.
Para darte vuelta a ese asunto, Triano no está tomando prestadas las páginas de los rivales de Estados Unidos, sino las del mismo equipo de su país.
Kevin Durant fue la estrella ofensiva en el Campeonato Mundial, pero fue la agresividad de la defensa estadounidense la mayor responsable para conseguir la medalla de oro en Estambul. Triano no tiene en Toronto defensores muy atléticos como Andre Iguodala y Russell Westbrook, pero su conjunto será más rápido y más físico de lo que fue la campaña previa.
DeMar DeRozan, Sonny Weems y Amir Johnson, tres repatriados con piernas jóvenes, tendrán un papel más determinante. Leandro Barbosa también brinda velocidad, mientras Kleiza le da versatilidad en la pintura.
"Seremos mucho más agresivos", dijo Triano. "Con el estado atlético que tenemos, vamos a ser capaces de mantener a nuestros rivales frente a nosotros de mejor manera. Y si podemos colocar más presión para provocar algunas pérdidas de balón, eso creará buenas opciones en la ofensiva".
Con lo mala que era la defensiva de los Raptors la temporada pasada, lo único que pueden hacer es mejorar. El ver qué tanto mejoran será el factor más importante para saber lo competitivos que pueden ser esta campaña.
Triano no trajo todas sus jugadas desde Estambul. Pero mientras se dirigía a comenzar su segunda temporada como entrenador en la NBA, él absorbió todas las lecciones que pudo de técnicos experimentados coo Mike Krzyzewski, Jim Boeheim y Nate McMillan.
Claro, Krzyzewski fue el que más lo impresionó. Triano alabó la forma en la que el entrenador de Duke "mantiene el equilibrio en las cosas que hace con respecto a la parte técnica y táctica, la sicológica y la de ser un líder.
"Cada vez que se trabaja con alguien así, uno aprende".
Ahora él regresa a los Raptors y lo único que es seguro es que esta será otra experiencia de la que podrá aprender. Tal y como suena, esas seis semanas con el Equipo de Estados Unidos tendrán una gran influencia durante los próximos siete meses en Toronto.
"Fue una gran experiencia para mí", concluyó Triano, “y fue muy, muy valiosa para mi desarrollo como entrenador".
