Acá les mostramos algunos jugadores que ahora mismo no están el mercado, pero que aún así pueden cambiar de equipo antes de que se cumpla el límite de transferencias el próximo mes de febrero:
Chauncey Billups – No es que el veterano guardia armador quiera dejar su ciudad natal. Pero puede ser un movimiento que tenga sentido si la junta directiva no es capaz de llegar a un acuerdo con Carmelo Anthony acerca de su extensión de contrato. Si el eje dela franquicia no se va a comprometer con Denver, lo único que tendría sentido para los Nuggets es irse a un completo proceso de reconstrucción. J.R. Smith, Nené y Kenyon Martin también podrían convertirse en nuevos agentes libres el próximo verano y eso significaría que un mariscal de campo de 34 años como Billups puede ser más valioso como un artículo de mercadería para traer a un jugador joven o una elección del draft mientras sigue estando en un buen nivel.
Andre Iguodala – Quizás el tiempo que ha pasado este verano con el Equipo de Estados Unidos en el Campeonato Mundial de la FIBA le dará a Iguodala la experiencia y la confianza para regresar a Philadelphia y finalmente llevar a los Sixers a un nivel más alto. Han esperado el destape del talentoso atacante y gran anotador durante seis temporadas, anhelando que actúe como un verdadero líder, pero él ha mostrado pocas veces esa virtud. Ahora será trabajo de Doug Collins, el nuevo entrenador, el de doblar la llave y desbloquear lo que hace falta para llenar su potencial. Pero si no logra esto en la primera mitad de temporada, hay muchas razones para pensar que los Sixers construirán su futuro con la segunda elección del draft, Evan Turner, quien juega en la misma posición, y enviar a Andre para que pueda florecer en otro lugar. Usualmente, la paciencia no es una virtud en la ciudad de Philadelphia.
Andrei Kirilenko -- AK-47 parece haber dejado atrás ese desanimo que lo hacían ver como una costosa molestia durante un par de temporadas. Ahora simplemnte es costoso y debe ganar cerca de 18 millones de dólares en el último año de su contrato. Los Jazz se recuperaron sagazmente de la partida del agente libre Carlos Boozer, que partió hacia Chicago, tras fichar a Al Jefferson para encabezar la delantera. Pero la preocupación a largo término es que Deron Williams se vuelva a comprometer con Utah cuando llegue la opciónde hacerlo en dos temporadas. Kirilenko es tan útil como una navaja Swiss Army en ambas partes de la cancha, pero él nunca será más que la tercera o cuarta opción de los Jazz, quienes están estancados en medio del lote de la Conferencia Oeste. Sus habilidades pueden ayudar a un equipo que seguramente estará en los playoffs o solidificar a un conjunto de elite que ya es candidto al título. Un buen intercambio podría darle a los Jazz un buen paquete de jugadores que convenzan a Williams de quedarse.
Jeff Green – ¿Por qué razón en el mundo los Thunder se atreverían a romper a su joven trío que también incluye a Kevin Durant y Russell Westbrook? Es la típica respuesta de una sola palabra: dinero.
Oklahoma City acaba de contratar a Durant con un nuevo contrato que costará – y lo vale – 85 millones de dólares y tiene a Westbrook esperando en la fila para que le paguen su salario. Esto no es tan fácil como tener un cajero automático que le de una fortuna a cada persona que esté haciendo la fila. Los Thunder invirtieron su tercera elección en el draft del 2009 en James Harden y esperan que este poco a poco se gane un role más importante y juegue más minutos. En la delantera tiene ahora a Cole Aldrich. Green sería naturalmente un delantero pequeño en la mayoría de equipos, pero ese lugar le pertenece al espectacular Durant. Habrá momentos en el desarrollo de los Thunder, un conjunto de mercado pequeño, en el que algunas decisiones tendrán que ser tomadas con un ojo en el balance finaciero y esta es una de esas.
Jason Thompson – Tiene todo lo que a uno de le gusta de un hombre grande joven – 12,5 puntos y 8,5 rebotes por partido la temporada anterior—y esa sería la razón por la que a uno le gustaría que formara parte de la fundación de un equipo que está en proceso de reconstrucción. Pero sucede que en los últimos seis meses los Kings obtuvieron mediante un intercambio a Carl Landry y a Samuel Dalembert y, además, eligieron en el draft a DeMarcus Cousins, lo cual dejó una delantera llena de gente. Eso hace que Thompson parezca el hombre que sobra o, al menos, el que deba probar lo que tiene nuevamente para ganarse sus minutos. ¿Estará listo para ceder esos minutos a Cousins y Landry y conformarse siendo un suplente cuando hay varios equipos que podrían usar y apreciar sus habilidades en la pintura?
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