Acá en la parte más temerosa del verano, tan lejos del inicio de una nueva temporada del baloncesto que no se puede escuchar siquiera el sonido de una zapatilla deportiva, aún sofocados (todavía) por la LeBronathon y sintiendo aún la resaca del mercado de agentes libres, esto es lo que están diciendo en Milwaukee: Algo se está elaborando.
Sí, hay un aroma distinto alrededor de los Bucks y, para variar, este sí vale la pena olfatearlo. Entre más lo miras, más te gusta el equipo, la forma en la que está armando y la dirección que está tomando. Uno de los mejores comentarios que se puede hacer acerca de los Bucks ahora mismo, es decir que ellos llegan a la próxima temporada con expectativas. ¿Cuándo fue la última vez que pasó eso?
¿Cuándo Ray Allen y Glenn Robinson estaban juntos?
¿Cuándo Don Nelson utilizaba corbatas de pescados?
¿Cuándo Alcindor hacía el gancho?
Eso fue el pasado; este es el presente y quizás el futuro. Nadie se atrevería a decir que los Bucks son candidatos para ganar el título de la Conferencia Este en la campaña 2010-11. Apenas la misma, larga y dolorosa sequía (dos temporadas ganadoras en la última década) que parece haber llegado a su fin. En realidad, los Bucks pueden colocar jugadores en el Partido de las Estrellas, luchar por el título de su división, ganar 50 partidos y jugar en mayo y aún dar diversión al público.
Un equipo con buenos jugadores en las dos posiciones más importantes está bien encaminado y que, además, deja satisfecho a la mayoría al ver las necesidades que tienen en otras posiciones. De repente, ellos tienen buenos lanzadores, grandes jugadores bajos los tableros y defensas que se pueden mezclar bien junto a Brandon Jennings y Andrew Bogut, lo cual convierte a los Bucks en un favorito sólido para ser uno de los Equipos en Alza para la temporada que viene.
Esa es una gran mezcla, ¿cierto? ¿Podrá este equipo, que aún es relativamente joven y que no ha tenido nada que probar, lidiar con esa carga?
"Cuando ganas 46 partidos, clasificas a los playoffs y superas las expectativas, así como lo hicimos la campaña pasada, nada puede ser mejor", afirmó el gerente general, John Hammond. "Este año, todo es distinto. Y nuestra responsabilidad es asumir el reto y adaptarnos a eso."
Hammond afirma que Bogut, que hace unos meses se recuperó de una horrible lesión en el brazo, debe estar al 100 por ciento para el comienzo del campo de entrenamiento. Hasta ahora, Bogut (de 25 años) y Jennings (de apenas 20) han desarrollado una buena comunicación en sus puestos de pívot y guardia armador, lo cual puede convertir a un equipo en uno ganador.
"Esos dos muchachos se dieron cuenta que son piezas fundamentales a largo plazo", dijo Hammond.
Hammond tiró el dado en los contratos este verano, siempre apostando por un equipo de mercado pequeño y alérgico al impuesto de lujo. Obtuvo a Corey Maggette en un intercambio con los Warriors, principalmente porque Maggette hace muchos viajes a la línea de tiros libres en un equipo que lo hace con poca frecuencia. Retuvo a John Salmons (33 millones de dólares) y fichó a Drew Gooden (32 millones), admitiendo que "se estiraron " por dos jugadores que posiblemente nunca habrían ganado esa cantidad de dinero en ningún otro lugar.
"En mis siete años junto a Joe Dumars", afirmó Hammond, refiriéndose a su jefe en los Pistons, "Joe quería poner un equipo competitivo en la cancha con una sólida estructura salarial. Estamos en el proceso de lograr eso".
En otro año más, los Bucks yo no tendrán que lidiar con el contrato de Michael Redd ($18 millones esta temporada), lo cual será crucial debido a que no se sabe lo que pasará con las negociaciones de trabajo. Pero ese es un asunto para tratar más adelante. Ahora mismo, se trata de qué tan rápido pueden los Bucks, con un par de piezas nuevas y muchas expectativas, crear una nueva identidad.
Después de todo no hay garantías de nada y aún hay algunas preocupaciones. Aunque Jennings estuvo grandioso como novato liderando y llevando a Milwaukee hasta los playoffs después de quedarse sin Bogut al final de la campaña, él debe mejorar e el porcentaje de aciertos (37 por ciento). Tras jugar por ganarse un contrato, ¿podrá Salmons seguir actuando al mismo nivel? Maggette fue un anotador sólido con los Clippers y los Warriors, pero siempre tuvo problemas para encajar en sus equipos y siempre estuvo mencionado en temas de intercambios.
Y además está Scott Skiles, el mejor entrenador de la liga en los últimos dos meses de la campaña anterior y en la primera fase de los playoffs. Él saca máximo provecho de sus jugadores, pero también tiende a cansarlos. Eso probablemente no pase la próxima temporada, ¿pero qué tanto podrá retrasar lo inevitable?
Todo indica que los Bucks van a algún lugar. Un buen lugar. El núcleo está sólido y los jugares de role (incluyendo a Ersan Ilyasova, Carlos Delfino y Luc Richard Mbah a Moute) son capaces de ascender a los Bucks en la tabla de posiciones. Gran parte de este crédito es para Hammond, en su tercer año en este trabajo, que entró al final de la temporada sin el espacio salarial que tenían los equipos que buscaban a un estelar agente libre, pero con un objetivo en mente.
"Con todo lo que logramos la temporada anterior”, afirmó, "simplemente no queríamos dar un paso hacia atrás".
Los Milwaukee Bucks, ¿elaborando algo especial? Puede ser
