Arenas tiene todavía dos años de libertad condicional tras haberse declarado culpable de tenencia de armas. Además debió pagar una multa de 5.000 dólares y realizar 400 horas de servicios comunitarios.
El jugador se negó a hablar con la prensa y se ocultó el rostro con una capucha al llegar a su casa.
Arenas puede reanudar ahora su carrera ya que al terminar la temporada regular se cumplió la suspensión que le impuso la NBA. En el 2008 firmó un contrato por seis años y 111 millones de dólares, que expira en el 2014.
Los Wizards trataron de transferirlo y de rescindir su contrato, pero su presidente Ernie Grunfeld dijo que el jugador seguirá en el equipo la próxima temporada.
El equipo está siendo comprado por Ted Leonsis, quien ha dicho que le dará una nueva oportunidad a Arenas.
Arenas ya comenzó a cumplir las 400 horas de servicio comunitario.
El jugador se metió en líos cuando llevó cuatro pistolas a los vestuarios en el Verizon Center para hacerle una broma a su compañero Javaris Crittenton, según dijo.
Crittenton también tenía una pistola en el vestuario ese día. Se declaró culpable de posesión de armas y recibió un año de libertad condicional, sin supervisión.
El incidente de Arenas descarriló a los Wizards, que terminaron la temporada con marca de 26-56 y se desprendieron de jugadores de muchos años como Antawn Jamison, Caron Butler y Brendan Haywood.
